Estrategia de contenidos y marketing digital: la estrategia de contenidos en marketing digital va mucho más allá de generar artículos para blogs, páginas web y redes sociales. Y es que también tenemos que encontrar la mejor forma de difundir esos contenidos para que realmente nos ayuden a atraer a nuestro público objetivo y poder medir los resultados.
Si queremos lograr resultados significativos y atraer nuevas oportunidades de negocio de forma orgánica, hay que tener en cuenta que una estrategia de contenidos es un procedimiento bastante complejo y profundo, conformado por distintas tareas, artistas y técnicas. Además, implica poner en marcha distintas prácticas y acciones de marketing digital, como el posicionamiento SEO y el seguimiento continuo de los resultados obtenidos.
Así pues, la estrategia de marketing de contenidos agrupa todo lo relacionado con la planificación, la gestión, el desarrollo y la distribución de contenidos, además del análisis de los impactos que tienen estos y los resultados que reportan. Y, a diferencia de las estrategias de comunicación tradicionales, el foco no son las necesidades de la empresa, sino las de las personas.
El objetivo de la estrategia de contenidos es educar al mercado, haciéndole ver la forma en la que pueden satisfacer sus necesidades y resolver sus problemas. Pero para conseguirlo, además de ser educativo, es necesario definir muy bien las diferentes etapas del plan:
Estrategia de contenidos y marketing digital: etapas del plan
- Planificación
En esta etapa debemos plasmar todos los objetivos que queremos conseguir, igual que las prácticas que nos permitan alcanzarlos y los indicadores y métricas que nos ayudarán a saber si vamos por buen camino. Las palabras clave, los temas de relevancia y personalizar en base al público al que nos dirigimos es de vital importancia.
- Definir a Buyer Persona
El Buyer persona es un elemento fundamental dentro de una estrategia de contenidos, ya que de ello depende la cualificación, la eficacia de los diversos materiales y la influencia que tendrán en los usuarios. Se trata de hacer una representación semi-ficticia del cliente ideal, que va mucho más allá del concepto tradicional del público objetivo.
En este sentido, se tienen en cuenta no solamente factores como la ubicación, la edad, el sexo, los ingresos o el nivel académico, sino también los gustos, las preocupaciones, los problemas, los sueños, las ideas, los pensamientos, etc. Hacer entrevistas con clientes, recoger información con el equipo comercial y analizar el comportamiento de los clientes son técnicas fundamentales.
- Creación y optimización de contenidos
Si hemos elaborado una buena planificación y definido adecuadamente al Buyer Persona, llega la hora de crear y optimizar los contenidos. El blog es el pilar fundamental de cualquier estrategia de contenidos dada su interactividad, su flexibilidad y a que está relacionado directamente con la propia marca. En él podemos publicar desde textos convencionales a podcasts, infografías, documentos audiovisuales, contenidos interactivos, etc. La investigación de palabras clave, el análisis de la intención del usuario y los criterios SEO son los factores a tener en cuenta para generar buenos contenidos.
- Difusión de contenidos
Una vez que tenemos los contenidos, llega el momento de difundirlos a través de los canales en los que se encuentran nuestros potenciales clientes, como el email marketing, las redes sociales, los backlinks, etc. Pero además, hay determinados aspectos que influyen en el posicionamiento orgánico, ya que permiten que los buscadores constatan la relevancia de los contenidos.
- Análisis de los resultados
Desde el primer momento, debemos establecer las métricas que nos serán de utilidad para valorar los resultados. Es que de estos indicadores depende la estabilidad, es decir, la capacidad de crecer de la estrategia para alcanzar nuestros objetivos. Estas métricas son el ROI, la generación de tráfico, el engagement y el posicionamiento SEO.
